QUE TRATA DEL NUEVO VICIO QUE COGIMOS, DE LA FREGONA TRANSFORMER Y EL ENGENDRO DE PURÉ

Algo malo, muy malo ha ocurrido llegado a nuestras vidas estos últimos días. Desde el mismísimo infierno nos ha llegado el objeto de la perdición, eso que arruinará nuestras vidas; la receta de las crêpes. Tanto Pili como yo, por culpa de Marta hemos caído en la tentación y en el pecado de comer crêpes a todas horas. Con chocolate, con mermelada, con jamón y queso, con azúcar, con mil y una porquería más. ¡¿Qué importa el sabor?! Siempre y repito, siempre vas a querer más.

Pili con cara de "Esto es un vicio, hermano"

Arald-maestrocrepero.

Perdición de jamón y queso.

Hablemos ahora de cuando compras una fregona y cabe en el palo y en la ciudad en la que vives no hay palos para dicha fregona. Es entonces cuando tienes que apañártelas y construir una fregona transformer que será la envidia de todo el vecindario. 

 Proceso de construcción del bicho

 Un, dos, probando.

Cuenta la leyenda que si un día hacéis puré de patatas en polvo por "ver de qué coño será" y os encontráis esto. Vais directos al infierno. No lo probéis. No os lo recomiendo. Un engendro de puré que ha vuelto directo desde donde ha venido, lo más profundo de las entrañas del reino de Lucifer.

Engendro de puré intentando atacarme

Agur!